Comentario
Existe en este pueblo vallisoletano una iglesia de proporciones mucho mayores que lo que podría corresponder al pobre monasterio medieval a que pertenecía, y en el que parece que estuvieron unos años los monjes cordobeses que fundaron después San Martín de Castañeda, sin que se cite en otros documentos hasta muy avanzado el siglo XII; sin embargo, en lo que fue su asentamiento provisional de pocos años, se encuentra una iglesia de mayor riqueza y monumentalidad que cualquier resto conocido de la segunda fundación en el rico monasterio de Sanabria.
La iglesia de Mazote es una singularidad de trazado en todo el arte cristiano español, puesto que posee dos naves cruzadas con ábsides en los cuatro extremos, a la manera de algunos monasterios orientales; la iglesia más cercana de este tipo es una basílica norteafricana del siglo VI; desde luego, la forma no tiene mucho que ver con los monasterios medievales y sí con iglesias martiriales de doble ábside. En esta iglesia se acumulan muchas reformas y restauraciones de mala calidad que ocultan lo primitivo, aunque puede esperarse que esto se solucione con la restauración en curso.
Si se toman como originales los datos internos de la planta, puede verse que el edificio estaba formado por dos naves de 4,80 metros de ancho, con cimborrio cuadrado; la nave de crucero medía doce metros de longitud entre los centros de los dos ábsides opuestos, de 2,40 metros de radio, y la nave longitudinal es de 27,20 metros, de longitud interior con ábsides opuestos de 2,40 y 3,20 metros de radio. La disposición y el sistema métrico son los normales en las iglesias centrales visigodas, aunque aquí con mayor riqueza de dimensiones y de formas, por la agregación de ábsides en los extremos de las naves. La disposición de las naves interiores y de los arcos y bóvedas debe ser fruto de una reparación del siglo X, con materiales y técnicas muy pobres frente a la magnitud de la planta y la riqueza de los fustes y capiteles acopiados desde procedencias distintas.
Los fustes son de mármoles, diámetros y alturas muy diversos, por el acarreo desde otras construcciones; entre ellos hay alguno de estrías torsas, y los que se han colocado en la restauración de la puerta del ábside oriental tienen una trama reticulada y arquillos superpuestos como las peltas de las celosías visigodas. Hay capiteles romanos, visigodos de distintos tipos y un buen número de los bizantinos leoneses, muy parecidos a los de San Román de Hornija, que sólo dista treinta kilómetros hacia el sur. No existe orden ni correspondencia entre los estilos y la colocación de los capiteles, que son habitualmente de distintos diámetros que los fustes sobre los que descansa, ni existen cimacios de ningún tipo.
San Cebrián de Mazote parece el resultado de reconstruir sobre el perímetro de una iglesia central del siglo VII, una estructura basilical con soportes traídos de otros monumentos, y técnicas de albañilería musulmana, que es lo único atribuible a época mozárabe.